El sector atraviesa una realidad compleja con un importante incremento en sus costos.

Como parte de la ronda de diálogos que genera la Unión de Producciones Regionales Intensivas (UPRI), con referentes de los distintas actividades que se desarrollan en la región, pudimos tomar contacto con Sergio Bravo para conocer la situación actual del sector viveros.
En la actualidad el sector no permanece ajeno a la problemática económica que atraviesa el país y el resto de las producciones intensivas. El constante aumento de los insumos productivos (gasoil, electricidad, envases, nylon para invernaderos, tierra, sustratos, etc), sumado al incremento de los impuestos municipales, provinciales y nacionales, la falta de créditos accesibles, la competencia desleal (producciones clandestinas no registradas) hacen que nuestra actividad atraviese un momento complejo.
A lo mencionado anteriormente, se debe agregar que las plantas no son un producto de primera necesidad por lo cual en épocas de recesión las ventas disminuyen, con el agregado que estas ventas son estacionales, con picos de demanda en otoño y primavera sin embargo el productor viverista trabaja y produce los 365 días del año y afronta los costos a diario.
Por otra parte, a nivel precios, el viverista no realiza aumentos al ritmo de la inflación (a fin de no ahuyentar a los clientes) por lo que sus márgenes de rentabilidad disminuyen mes a mes con cada incremento de la inflación.
Ante este panorama, Bravo explica que “no existe un mensaje por parte del gobierno hacia nuestro sector en particular como por ejemplo prodría ser un fomento a la producción”.
Al ser consultado sobre qué tipo de viveros podemos encontrar en la región, el Técnico Forestal nos informa “Existen diferentes tipos de viveros, en primer lugar podemos hacer una primera diferenciación entre viveros públicos y privados.
Dentro de los públicos encontramos los dos viveros que posee en municipio de General Pueyrredón en la zona de Laguna de los Padres. Con respecto a los privados podemos clasificarlos en viveros de venta al público, viveros productores y con venta al público y también vivero de especialidades.”
Asimismo, Sergio Bravo explica “Nuestro Partido cuenta con un gran potencial para la producción de plantas gracias a las características de clima, agua y suelo que son propias de la región. Encontramos viveros que producen y venden arboles de grandes dimensiones, pasando por el viverista que produce flores de estación (petunia, pensamientos, violas, etc), el vivero de productor de kiwi, cuya actividad ha tomado un gran impulso en nuestra zona en los últimos años, los cultivadores de cactus y crasas, etc. Sin duda el viverismo en nuestra zona está ampliamente representado.”
Sobre la llegada de la tecnología al sector rural, el referente del sector expone “En mi experiencia personal la incorporación de tecnología en nuestro rubro está asociada al desarrollo que se da en otras regiones del país como es Corrientes y Misiones donde la producción de madera de cultivo favorece la investigación en sustratos, fertilizantes, envases, etc para mejorar la obtención de plantines en vivero. Por otra parte también incorporamos desarrollos que en primera medida son destinados a la horticultura como puede ser el caso de los productos fitosanitarios e insumos varios”. Concluyendo “El INTA desde sus diferentes áreas aporta información productiva muy valiosa para el productor. Finalmente el intercambio de experiencias entre viveristas permite asimilar conocimientos empíricos que se generan tranquera adentro.”